India: tribus amenazadas por planes de conservación de la naturaleza preparan una protesta histórica

16 marzo 2018

Mujeres baigas amenazadas con ser ilegalmente expulsadas de su tierra, en la Reserva de Tigres de Achanakmar. Los habitantes de la aldea están decididos a quedarse y dicen que no quieren abandonar su hogar en el bosque. © Survival

Esta página se creó en 2018 y puede contener terminología en desuso.

Cientos de indígenas de la tribu baiga, de la zona en que se inspiró Kipling para escribir El libro de la selva, se unen para oponerse al intento de las autoridades de expulsarlos de sus bosques, que habitan y gestionan desde tiempos inmemoriales.

Baigas procedentes de más de 70 aldeas diferentes, repartidas por un área de 1.500 kilómetros cuadrados, se han juntado para unir fuerzas. Las protestas se han desencadenado por las tentativas oficiales de expulsar a dos comunidades baigas de un “corredor” de fauna salvaje. Docenas de comunidades baigas vecinas temen ser las próximas; si las expulsan de sus hogares no hallarán más que pobreza y explotación.

Una mujer baiga trabaja por un mísero salario en una mina de bauxita. Este es el futuro que el destino podría deparar a muchos baigas amenazados de expulsión ilegal. © Sayantan Bera/Survival

Los baigas están especialmente preocupados por dos expulsiones inminentes, ya que tanto las autoridades del Estado como el Fondo Mundial para la Naturaleza (WWF) prometieron que no habría expulsiones en los “corredores”, que comunican entre sí las reservas naturales protegidas.

Según la ley, todo reasentamiento de pueblos indígenas ha de ser voluntario, incluido el de quienes viven en áreas de conservación designadas. Sin embargo, algunos baigas denuncian que sufren amenazas y actos de intimidación y violencia hasta que no les queda más remedio que abandonar sus hogares.

Un anciano baiga, Bhardan Singh, contó a Survival International: “Los guardaparques me pegaron hasta que me caí del árbol. Me rompí la cadera y no podía ponerme de pie. Fui arrastrándome hasta el borde del parque. Los guardas me dejaron allí tirado y se fueron.”

Estos indígenas de la tribu khadia fueron expulsados de una reserva de tigres y obligados a vivir durante meses bajo lonas de plástico. Rara vez se cumplen las promesas de “indemnización”. © Survival

La protesta prevista para este fin de semana es un fogonazo local en una cuestión de alcance nacional. Los pueblos tribales que habitan reservas de tigres por toda la India se ven forzados a abandonar sus tierras ancestrales en nombre de la conservación de el majestuoso felino. Y ello pese a que en la primera reserva de la India en que una tribu conquistó el derecho a permanecer en su territorio la población de tigres aumentó rápidamente, demostrando que humanos y tigres pueden convivir y prosperar.

Survival International, el movimiento global por los derechos de los pueblos indígenas y tribales, lanzó un boicot turístico en noviembre del año pasado que insta a quienes viajen a la India a no visitar ninguna de las reservas de tigres del país hasta que la autoridad nacional del tigre respete los derechos de los pueblos indígenas a vivir en sus bosques y protegerlos.

Según ha manifestado el director de Survival, Stephen Corry: “Estas expulsiones, tanto en el interior como en el exterior de las reservas de tigres, están totalmente injustificadas y son ilegales. No solo destruyen la vida de las personas que se ven forzadas a abandonar sus hogares, sino que tampoco ayudan para nada a los tigres. Las autoridades y WWF prometieron que no habría expulsiones pero, como tantas veces en el pasado, estas promesas no son más que papel mojado.”

Apoya a las tribus de la India y únete al boicot turístico a las reservas de tigres.

Información de contexto

- Baiga significa “hombre de la medicina” o “curandero”. Los baigas se distinguen por sus tatuajes distintivos y por su íntima relación con su entorno.

- En 2013 se expulsó a indígenas de la Reserva de Tigres de Similipal, y poco después se les vio viviendo en condiciones miserables bajo lonas de plástico.

- Muchos baigas fueron expulsados de la cercana Reserva de Tigres de Kanha en 2014. No recibieron tierras, casas ni apoyo, pero se suponía que comprarían tierras con el dinero de su indemnización, una práctica ajena a quienes han pasado toda la vida en el bosque. Dijeron a Survival: “Nos dieron algún dinero, pero estamos perdidos, caminando en busca de tierras. Aquí solo hay tristeza. Necesitamos la selva.”

Compartir